lunes, 17 de diciembre de 2012

Kurabiye salados turcos


Kurabiye salados
 


 
 
 

 

¡Hola otra vez!

Hoy os  traigo una receta salada de Turquía de nuevo. Estos lacitos (aunque se pueden hacer de otras formas) se llaman Kurabiye, se lee “curabie” y significa “galleta”, pero caseras, porque las galletas de las compradas son “Biskuvit”.

Para ser una receta turca, es bastante sencilla (cosa rara), se hace en un plis, se junta todo, se mezcla, se da forma, se mete en el horno, y tiene el mismo tiempo de horneado que una galleta más o menos dependiendo de los gordas que salgan.

Esta receta me la dio mi cuñada Filiz cuando yo era soltera todavía y estábamos de visita en su casa, como me veía aburrida, me metía en la cocina a enseñarme cositas, es una persona maravillosa, es buena, pero buena de corazón, no conozco a nadie así, te lo da todo sin pensar en ella, te ayuda con todo, es muy comprensiva, nunca piensa mal de nadie, siempre es amable, cariñosa, todo le parece poco para darte, nos dejó su casa, me dejó su vestido del día antes de la boda, me acompañó a la peluquería el día de mi boda, me ayudó a vestirme, ese día que nadie de mi familia pudo estar ahí, era ella la que hizo de madre, amiga, cuñada, hermana y de todo. Me gustaría que mi hija se pareciera a ella de mayor. Guardo los mejores recuerdos allí con ella, su hijo que era pequeñito y empezaba a decir sus primeras palabras, cortitas, y él me enseñó así mis primeras palabras también en turco, me decía “aba gel” (abla significa hermana, u otra mujer mayor que tú allí, por respeto, pero los niños en vez de abla, dicen aba) aba ven, aba vete, aba corre, aba mira, aba camión, aba toma, aba coge, así jaja, mi mejor maestro, Mehmet, os lo voy a presentar: jaja aquí estamos a la sombra de una higuera fresquitos, se está comiendo mi helado, jaja.
 
Este es Mehmet, y mi cuñada Filiz, detrás.
 

 

Bueno, pues os dejo ya de charla y os dejo la receta, espero que la hagáis y os guste.

En Turquía casi todas las recetas son transmitidas de madres a hijas, y por el boca a boca, como antiguamente, y se miden, como los americanos con sus tazas, ellos los miden en vasos de agua (el duralex de toda la vida) o vasos de té como el que yo usé, el cual medí y son unos 100 ml.

 

Ingredientes: (salen 2 bandejas)

1 barra de mantequilla ablandada

1 vaso de te (o 100ml) de aceite de girasol o de oliva, lo que os guste más, ellos lo hacen con girasol, pero yo no tenía y lo hice con el de oliva virgen.

½ vaso de te (50ml) de vinagre de vino blanco

½ vaso de te (50ml) de agua tibia

1 yema de huevo

1 clara para pintarlos después

2 cucharadas de azúcar

2 cucharaditas de sal

1 sobre de levadura royal

4 ½ tazas de harina normal

1 bol de sésamo

 

Elaboración:

Ponemos en el bol de la K.A. u otro cualquiera si lo hacemos a mano, la mantequilla ablandada, el agua tibia, el azúcar, la sal, la levadura y el huevo y (con las manos limpísimas) empezamos a mezclar con las manos estrujando bien la mantequilla. Después se añaden el resto de los ingredientesy se pone el accesorio de gancho panadero en la máquina, si lo hacéis a mano, seguir amasando hasta obtener una consistencia parecida a la masa de las galletas, ésta masa es más elástica y no se rompe tanto como la de las galletas. Si hace falta, se le añade más harina. Mirad, más o menos esta consistencia:

 

Después se puede empezar inmediatamente a formar los lacitos, o cualquier otra forma que os guste, normalmente se hacen lazos porque es más rápido. Así:

 

Una vez formado el lazo, se pasa por la clara de huevo

 

Y a continuación por el sésamo:

 

También se puede pintar con pincel y esparcir el sésamo, ahorras sésamo, y no queda tan tupido.
A continuación, se van colocando uno a uno en las bandejas separados unos de otros un poquito, porque tienen levadura y se pueden juntar. De todas maneras si se juntan un poco no pasa nada. Se pueden dar la forma que queramos, aquí tenéis algunas muestras, como trenzas, piñas, roscos, etc:
Se hornean a 170ºC durante unos 20 o 25 minutos, o cuando los veáis doraditos:

Se dejan 5 minutos sobre la bandeja, y a continuación se mueven a una rejilla enfriadora.
Y... ya se pueden devorar! con un te a mediodía o por la tarde están de muerte. Mirad qué chulo el stand que me regaló en mi última estancia allí mi otra cuñada Kader.

Eso es todo! espero que os guste! y ya estoy preparando algo diferente...

Besos!!!!!